La secta que todos conocemos.

El otro día fui a un país subdesarrollado a hacer turismo. Me pude colar en una reunión de una secta bastante siniestra. En las paredes de aquel lugar destacaban las representaciones de cadáveres colgados o torturados y llorando. Al fondo, un hombre con un vestido se dirigía a todos los demás, obligándoles a sentarse y arrodillarse continuamente. Cuando concluyó, pasaron un bote donde los afiliados 'donaban' grandes cantidad de dinero. Pensaréis, "¿cómo pueden tragarse esa trola?" o "Es típico de un país subdesarrollado".

Al parecer, les contó que en el juicio final, sólo a los fieles de aquella secta se les permitiría ir al paraíso, todo gracias a una especie de héroe extraterrestre que había venido hace miles de años al planeta Tierra para sembrar la paz.

Luego estuve hablando con uno de los fieles, que me invitó a un desfile esa misma tarde para conmemorar la muerte de su héroe. No me pude resistir a mi curiosidad, y allí fui. Pude ver a cientos de fieles descalzos con túnicas de la cabeza a los pies y con dos agujeros para ver. Era realmente siniestro. Transportaban a sus hombros, sin ayuda de ninguna maquinaria, una estatua de toneladas con la imagen de un asesinato.

Me contaron que hay gente tan metida en la secta, que se obligan a vivir encerrados con otros fieles. Además, era totalmente machista, porque sólo los hombres podían ser líderes de la secta.

La cosa pasó de castaño a oscuro cuando un hombre con el torso desnudo, comenzó a autolesionarse con un látigo en la espalda hasta sangrar... Nadie hacía nada por impedirlo.

Bueno, pues he estado investigando, y el nombre de esta secta es: Iglesia Católica.

Y esto no pasa en un país subdesarrollado, pasa en España.

Miles de monjas viven recluidas, convencidas de que se están ganando 'el pairaiso'.

Miles de personas se pelean cada Semana Santa por ser quienes lleven descalzos las representaciones de toneladas de las procesiones.

Esto está pasando.